PREGUNTA

¿Cuáles son las razones por las que todo el esfuerzo que está realizando RTVE en destacar e informar exhaustivamente, sin contrapunto alguno, sobre la boda de don Felipe y doña Letizia no se realice, asimismo, sobre la ampliación europea o sobre las inmediatas elecciones al Parlamento Europeo. ¿Considera el Gobierno que la boda principesca, que debería ser un acto privado, es más importante que unas elecciones democráticas al Parlamento Europeo? ¿Cuál es el motivo para semejante desmesura informativa sobre una boda y el silencio en relación con unas elecciones? ¿Cuál es la causa de que en toda esa catarata de información carísima y pormenorizada sobre la citada ceremonia, no haya el menor resquicio para una crítica democrática ante este auténtico lavado de cerebro? ¿Es normal que una administración socialista apueste más por la crónica rosa que por la información política contrastada?

Palacio del Senado, 14 de mayo de 2004.

--Iñaki Mirena Anasagasti Olabeaga.

RESPUESTA DEL GOBIERNO

El enlace real entre S. A. R. el Príncipe de Asturias y doña Letizia Ortiz Rocasolano ha sido un importante evento institucional y como tal ha recibido la oportuna cobertura radiotelevisiva.

Cobertura radiotelevisiva demandada, además, tanto a nivel nacional como mundial, por operadores públicos y privados y que ha obtenido un masivo seguimiento, tal como demuestran las audiencias televisivas.

No se ha producido desmesura informativa por parte de RTVE en relación con dicho enlace real, sino un tratamiento adecuado a su importancia institucional y repercusión social.

En cualquier caso, las no muy numerosas protestas en relación con la boda real tuvieron reflejo en los informativos de TVE de los días 21 y 22 de mayo. Concretamente, hubo seis noticias de dichas protestas en distintas ediciones de los telediarios del viernes y el sábado, con un total de cuatro minutos y veintitrés segundos de información sobre las mismas.

RTVE es una empresa pública, pero la información dada por RTVE no es la de una «administración socialista», sino la de profesionales independientes, trabajando libremente y con criterios estrictamente profesionales. Es evidente, en cualquier caso, que la programación de RTVE en relación con dicho evento institucional se ha alejado claramente de programas que puedan ser calificados como «crónicas rosas», que sí han realizado, con total libertad como es propio, otras cadenas privadas.

Por otra parte, no ha sido una producción carísima, sino adecuada a una señal institucional que se facilitó a todos los operadores del mundo, y a una cobertura informativa y de programación en la línea seguida en otros acontecimientos institucionales por otros medios.

RTVE no ha silenciado las elecciones europeas, sino todo lo contrario. Ha llevado a cabo una adecuada cobertura, incluido un debate televisivo entre los cabezas de lista de las principales candidaturas.

Radiotelevisión Española en sus distintos canales de radio y televisión ha informado exhaustivamente sobre la ampliación europea y ha contado con un plan de cobertura de las elecciones al Parlamento Europeo, que ha recibido conformidad con la Junta Electoral.

Madrid, 23 de junio de 2004.

--El Secretario de Estado de Relaciones con las Cortes.