El pasado lunes 14 de noviembre, en Lehendakaritza, mantuvimos una larga conversación con el Lehendakari para pasar luego a una frugal comida donde seguimos hablando en una puesta al día de la distinta información y opinión que tenemos unos y otros en asuntos concretos. Por el Senado estuvimos Zubia, Albistur, Etxegoyen, Loroño, Bravo y Maqueda y,en el almuerzo, los consejeros Zenarruzabeitia, Balza, Inclan, Aguirre y López de Gereño, faltando Azcarate por viaje a Argentina y Samaniego por una reunión sobre la llamada gripe aviaria.

El Lehendakari había estado ese día por la mañana en Bilbao inaugurando la I Conferencia Internacional sobre Políticas Culturales. La semana anterior Ibarretxe había estado asimismo en el Palacio Euskalduna donde se había aprobado una declaración de diez puntos, la Declaración de Bilbao, contra la llamada brecha digital, habiéndose aprobado un decálogo que el propio Lehendakari llevaría próximamente a la Cumbre de Túnez, mal mirada por los estados y las empresas que ven en lo digital algo que pone en cuestión su poder, porque, entre otras cosas, una de las resoluciones aprobadas reforzaba el compromiso de ofrecer software libre a los países pobres. Estados Unidos se aferra a la idea de no ceder el control de Internet. Los estadounidenses plantean que no pueden ceder el control por la importancia que la red tiene para su economía y la necesidad de evitar que se produzcan “distorsiones” en caso de una supervisión multilateral.

Uno de sus miembros dijo a los periodistas, sin el menor amago de una sonrisa, que Internet “es un autobús con un chofer que funciona bien, y no vamos a poner cien chóferes al mando de un solo vehículo”.

Estados Unidos alude también al problema del terrorismo cibernético y añade que sería contraproducente compartir el control de Internet con países que reprimen las libertades y los derechos humanos, aunque esto suena a excusa.

El grupo especial de trabajo sobre el futuro de la red, opina por el contrario que se deben crear las condiciones para que todos los países puedan hacer oír su voz.

La Unión Europea (UE) estuvo presente en Túnez con una fórmula de compromiso que consistiría en suprimir el control político de EE.UU. sobre la Corporación que asigna nombres y números de la red, y tiene su base en California, reemplazándola por un órgano intergubernamental de carácter técnico y separado de las Naciones Unidas.

Ibarretxe en la reunión previa que tuvimos con él en Lehendakaritza, antes de viajar a Túnez, nos dijo que el desarrollo de la globalización cultural supone un problema para los pequeños territorios porque uniformiza ideas, tendencias y mercados. El Lehendakari nos advirtió de esta amenaza aunque destacó que, por reacción en los últimos años, se ha tejido “una red de acceso universal al conocimiento”. El objetivo del encuentro donde había estado era la “diversidad” que se puede conseguir “desde lo local a lo global, y desde lo universal a lo cercano”, según Ibarretxe. La 33ª Conferencia general de la UNESCO, celebrada el mes pasado en París ahondó en esta idea y amparó la capacidad de decisión cultural de sociedades minoritarias, como la nuestra.

“A partir de ahora no se podrán limitar las medidas legislativas, financieras y fiscales en apoyo a la cultura propia de las naciones sin Estado”, nos dijo Ibarretxe. Para el Lehendakari, las comunidades minoritarias “con una fuerte identidad política” se encuentran en “desventaja” frente a las exigencias de la sociedad de la información: “Tenemos que ser capaces de afrontar los desafíos de esta era”.

LA INVESTIGACIÓN

El Lehendakari había denunciado que la Comunidad Autónoma Vasca había dejado de recibir en los últimos tres años 876 millones de euros por no tener transferida la competencia en investigación científica. “Desde 1980 hemos subido 24 veces la inversión en I+D+I. Es vital la alianza entre Universidad, empresa y sociedad, así como entre tecnología, información y gestión que deben ser las bases de nuestra labor” nos decía entusiasmado un Ibarretxe que en dos semanas se había negado a hablar de especulaciones etéreas y posibles treguas y había hecho hincapié en presidir foros dedicados a la investigación. Nada menos que tres en dos semanas, porque los déficits derivados de los incumplimientos estatutarios adquieren en la actualidad una mayor importancia y pueden hipotecar el éxito de adaptación de Euzkadi. La no transferencia de la investigación y desarrollo (I+D) ha significado una losa estructural a la hora de contar con centros de investigación en Euzkadi. Como botón de muestra, de los 116 centros de investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas en el Estado español, Madrid cuenta con 47, Andalucía 21 y Extremadura 2, los mismos que nuestro País (dos centros en la UPV)

BRAINSTORMING

Al Lehendakari le gusta poner encima de la mesa un asunto y hablar libremente sobre él, pero como los temas de actualidad eran tantos, no dejamos de analizar desde el último debate autonómico celebrado la semana anterior en el Senado y los peligros de que el PP imponga su criterio de que la Conferencia de Presidentes tenga un reglamento, un orden del día de cemento y la posibilidad de unas votaciones de todos contra el vasco. Estudiamos la tramitación del estatuto catalán y el debate presupuestario. Ese lunes no las teníamos todas con nosotros porque no terminaba de concretarse la negociación con un PSOE que amenazaba votar en contra en el Parlamento Vasco mientras no terminaba de cerrarse una negociación que no podía ser más lógica entre ambas administraciones si hubiera una apuesta clara por el hecho diferencial que Patxi López esgrime cada vez que habla en continuas operaciones de marketing que al final no se sustancian en nada. Ese día habían tenido una bochornosa intervención en el pleno del ayuntamiento de Bilbao poniendo en cuestión la carrera de coches, la “World Series”, acusando a los organizadores de fracaso y despilfarro y diciendo que era una carrera de medio pelo, como un partido Lemoa-Torrelavega. El PSE ha cogido esta demagógica bandera sin datos objetivos porque se ve ya dirigiendo Bilbao y quiere cargarse este proyecto después de no haber dicho nada hasta ahora, por pura estrategia electoral y por no dar baza alguna a Azkuna, y para ello son capaces de cargarse algo bueno para Bilbao con tal de sacar cabeza. Ya lo hicieron con el Guggenheim, aunque ahora no dejan de sacarse fotografías con el fondo de Puppy. Son así. A la sociedad “Urban Circuit” le han acusado de ser un batzoki y todo porque no terminan de asumir que no ganaron las elecciones.

Comentamos ese doble discurso de pompas de jabón de un PSE que no termina de asumir la realidad vasca ni mucho menos defenderla. Ese día también, Zapatero en Madrid se paseaba con el presidente chino Hu Jintao, sin la menor mención a los derechos humanos para no molestar al mandarín pekinés, sin rueda de prensa, para que no hubiera ninguna pregunta sobre el Tibet o los derechos de los chinos. Y todo eso hecho por un Zapatero que dijo que los derechos humanos serían el eje de su actuación política. El comunicado final había sido una vergüenza.

La comida fue muy agradable, aunque hay que decir que el Lehendakari come como un pajarito pero eso no le impidió animar el debate y preguntar por cómo veíamos las cosas desde nuestra atalaya madrileña con un PP sobrado de moral y un PSOE preocupado por las encuestas.

Brindamos por Gabriel Inclán, el consejero de Sanidad cuyo cumpleaños se celebraba ese día. Posiblemente en enero volvamos a estar con el Lehendakari en un encuentro de este tipo, positivo, amable y de intercambio de puntos de vista sobre la actualidad.

Nota: Esto fue el lunes 14. El martes 15, el Lehendakari en vuelo en el mismo día había estado en Túnez y entregado a Kofi Annan el decálogo de Bilbao. Silencio en España. Era una magnífica foto. ¿Que nos cierran la puerta? Nos metemos por la ventana. Eso es también gobernar.